El Domingo que recién acaba de transcurrir parecía ser uno
en el que, en el ámbito deportivo, sobresaldrían deportes como la Fórmula 1 con
un Pastor Maldonado que nos llenaba de ilusión partiendo de segundo en el Gran
Premio de Singapur, el Béisbol con la férrea lucha de equipos por entrar en la
postemporada de las Grandes Ligas (y Miguel Cabrera en la disputa por optar a
la triple corona), la Supercopa de Baloncesto Español donde el Real Madrid y el
Barcelona llevaron su rivalidad futbolística también a este deporte, o el
Fútbol que nos ofrecía un día de clásicos ingleses como el Machester United Vs.
Liverpool o el Manchester City Vs. Arsenal. Personalmente, y esto es una gran
muestra de que este deporte crece cada vez más en la región latina, considero
que el mejor sabor de boca que dejó este Domingo deportivo fue el encuentro
disputado en Baltimore entre los Ravnes en contra de los Patriots; en el cual
los Ravens tenían la oportunidad de cobrar una mínima venganza en contra de los
de New England tras caer eliminados el año pasado en su contra.
La antesala del juego daba a suponer un partido sumamente
cerrado con oportunidades contadas por parte de las ofensivas de crear su juego
pero, a medida que el juego iba transcurriendo, las defensivas se fueron
diluyendo y fue donde el duelo Brady y Flacco dio inicio. ¿Qué se puede decir
de Tom Brady? Este QB demuestra un dominio espléndido en cada una de las
facetas del juego que evidentemente nos hacen suponer que terminará, más pronto
que tarde, en el Salón de la Fama y no es solo por el dominio de las jugadas
aéreas y terrestres; sino porque su presencia sobre el emparillado es
totalmente notoria generando un liderazgo que llevan a su equipo a ser una de
las mejores ofensivas de los últimos años en la NFL. En el transcurso del juego
se evidenció la experiencia y calidad de Brady, donde la mayor demostración de
esto se hace sentir en el cómo lee las defensivas rivales cambiando de jugadas
sobre la misma línea de juego haciéndome recordar el mejor Peyton Manning de
los Colts.
En la otra cara de la moneda tenemos un Joe Flacco que, año
tras año, va adquiriendo mucha más experiencia de juego que me hacen pensar que
se encuentra muy cerca de alcanzar ese añorado Super Bowl que la fanaticada de
Baltimore tanto merece. Los Ravens cuentan con una bien conocida defensiva y
este año, con el coordinador ofensivo Cam Cameron, están creando una ofensiva
letal en todos los sentidos ya que ahora no solo cuentan con grandes jugadas
terrestres, sino que se han hecho mucho más polivalentes en jugadas aéreas
igualmente punto que quedó demostrado en el juego de este Domingo por la noche.
Al hablar de la ofensiva terrestre de los Ravens debe hablarse de Ray Rice; el
número 27 de Baltimore ayer se hizo partícipe de un sinfín de jugadas que
generaron las oportunidades necesarias para que la defensiva de New England se
preocupara más por detener más las jugadas terrestres que por las aéreas, y fue
allí donde Flacco supo aprovechar los alas cerradas para crear jugadas de TD.
En un momento del partido parecía que, aunque los Ravens
consiguieran un sinfín de puntos, Brady, con juagas sobre la marcha,
desbalanceaba la defensiva de los de Baltimore y respondía cada vez que estos
se iban arriba en el marcador, esto llevó a que los Patriots se encontraran
arriba en el marcador a finales del tercer cuarto y es aquí donde llega una de
las jugadas claves del partido ya que Baltimore tenpia la posesión del balón
faltando una yarda para el primero y diez para los Ravens y John Harbaugh
decide utilizar una jugada terrestre sin siquiera darle el balón a Rice
perdiendo yardas y otorgándole así el balón de nuevo a los Patriots. Luego, por
el despertar defensivo de Baltimore, logran finalmente con un segundo TD de
Pierce y un Gol de Campo imponerse sobre New England tan solo por un punto.
Quería traer este juego sobre la mesa de debate por dos
puntos principales:
El primer punto es que Baltimore, siendo un equipo joven con
gran defensiva que ya ha demostrado muchísimos años lo difícil que puede ser
superarla, y ahora con una ofensiva polivalente con grandes alas cerradas y
opciones de pase y un corredor de fuerza como Rice que es el arma principal de
estos Ravens en la ofensiva, deben no dar por sentado que con esto llegarán a
un Super Tazón, deben meditar y no cometer equivocaciones pequeñas como la
jugada en el tercer cuarto con una yarda por conseguir y utilizar la peor de
las armas de su ofensiva. Son esta clase de equivocaciones que separan a los
equipos ganadores del resto.
El segundo punto es el increíble desempeño de Torrey Smith
en el juego consiguiendo dos pases de anotación y generando yardas que le
permitieron a los Ravens la consecución de una victoria que bien puede
significar el incentivo que necesitaban para senitrse un equipo capaz de
derrotar a cualquier otro de la NFL. Sucede que el hermano de Smith había
fallecido la madrugada de Sábado para Domingo por un accidente de motocicleta
y, aún así, Torrey decidió hacerse partícipe del juego de Domingo por la noche
y jugar el, por ahora, juego de su vida. Son estos momentos del deporte que
hacen grande a los grandes.